¿Quién no disfruta de un buen partido de futbol con sus amigos por la tarde? Creo que muchos ¿no? Bueno hoy les vengo a comentar de algo que descubrí en mis vacaciones en Iquique, al salir una tarde a tomar unas cervezas con unos amigos teníamos muchas ganas de ver unos partidos pero algunos querían ver lindas escorts. El mesero que nos atendió nos comentaba que a unas pocas calles de nuestro bar se encontraban unos campos de futbol donde practican un grupo de escorts, muchos se rieron sin embargo yo estaba muy interesado y fui muy insistente, así que decidimos pasarnos un rato por allí. Al llegar lo que vimos eran unas diosas que podían controlar las pelotas a su placer, hermosas, fuertes, radiantes y determinadas mujeres que entrenaban sin descanso, una tras otra anotando goles sin parar, feroces con el espíritu de un león arremetían contra la portería, mis amigos se encontraban paralizados, pero no dejaba de decir lo sorprendido que estaba de esas escorts futbolistas de Iquique. Su entrenadora nos miraba desde lejos con una inmensa sonrisa, al ver la cara de idiotas que tenían mi amigos, ella les pido a sus escorts futbolistas que jugaran un partido amistoso, yo supongo que sería para restregarnos su talento en nuestra cara, nosotros encantados nos quedamos a ver esas hermosas y talentosas mujeres. A medida que iba pasando el partido nos sorprendíamos como en vez de cansarse las escorts parecían que obtenían más fuerza, más motivación para ser las vencedoras. Tontos mis amigos decían que solo se quedaban por sus cuerpos sin embargo yo sabía que era por lo entretenido que estaba el partido, ya que estas escorts eran unas jugadoras de alta clase, dominaban el balón con mucha técnica, sin siquiera pensarlo, nítidas en su juego.